martes, 8 de enero de 2008

Benéficas las lluvias para el campo.


VALLE DE LA TRINIDAD.- La lluvia que registraron los pluviómetros instalados en las distintas cuencas durante el fín de semana pasado, son consideradas por los agricultores como “un milagro que cae del cielo”. Y es que los han motivado de tal manera que los agricultores de los valles altos y costeros planean cultivos diversos, particularmente los que soportan bajas temperatura e inclusive heladas.
Hasta ayer por la tarde, tanto en el Valle de la Trinidad como en el Real del Castillo, el reporte es halagüeño para los productores agrícolas, ganaderos y granjeros. Don Juan Villarreal Limas, granjero en Real del Castillo Viejo, da cuenta de que los arroyuelos alegran su entorno con la renovación de sus aguas, testimonio de la abundante lluvia. Dice que caen como un milagro enviado del cielo, pues ya era muy notorio el efecto de la sequía y, aunque se encuentran un tanto inundados los caminos vecinales, eso es lo de menos, pues “son más los beneficios que nos va a dejar la lluvia”. Hay encharcamientos y lodo, mucho lodo, pero no importa, “preferimos eso que la sequía”.
ALEGRÍA EN EL VALLE Mientras tanto, en el Valle de la Trinidad, el agricultor David Terrazas Corona, integrante de la Asociación de Horticultores de esa comarca, comentó que hay optimismo y la expectativa es aprovechar las lluvias para sembrar diversos cultivos. Agrega que las del pasado fin de semana son de las mejores lluvias, porque su persistencia y lentitud no causa destrozos a los cultivos y en cambio permite la recarga de los mantos acuíferos en la región. Insiste en que hay alegría entre los productores, ya no tienen que preocuparse, aunque admite que aún falta mas agua para la recarga completa de los mantos freáticos que han sido agotados por las persistentes temporadas de sequía.
SIN DAÑOS También el delegado municipal de esa comarca agrícola, lo mismo que el de Real del Castillo, evaluaron el impacto de las lluvias y determinaron que los daños son mínimos, comparados con los beneficios que se esperan. Hablan de encharcamientos en calles que de momento se tornan intransitables, pero en cuanto deje de llover preparan su rehabilitación para que todo vuelva a la normalidad y el beneficio de la lluvia
ahí queda, en el subsuelo. Señalan que si bien la época de sequías tenía en incertidumbre a los agricultores, con estas pocas lluvias renace la esperanza de quemejoren las expectativas y el panorama sea halagüeño.

No hay comentarios: